El desayuno en la cama es probablemente la mejor ocasión para nuestros panecillos de pizza rápidos. También son geniales para merendar. Solo tienes que colocar pan tostado en moldes para magdalenas, añadir un poco de jamón, salsa, queso y bacon por encima, cocinar en el horno y en poco tiempo habrás creado el desayuno perfecto.

Estas baguettes de pizza caseras son fáciles y rápidas. Tu congelador no estará siempre lleno de pizza, incluso puede que esté completamente vacío. Solo tienes que cortar unas baguettes, untarlas con salsa de tomate y cubrirlas con lo que quieras, como salami, cebolla, pimiento y queso. Mételas en el horno y sírvelas calientes.

Cuando el tiempo apremia y tu bolsillo va un poco justo, estas ideas creativas de recetas te ayudarán a llevar algo diferente a la mesa con poco esfuerzo. Para nuestra pizza sándwich, coge una pizza Dr. Oetker, cúbrela con albahaca y tomates secos, dóblala por la mitad una vez descongelada y hornéala en una sandwichera hasta que esté dorada. Si sobra, puedes llevártela de almuerzo.

Nadie olvidará esta tendencia: el wrap de tortilla. Se adapta a nuestra especialidad, las pizzas sabrosas. Para hacerla, corta la tortilla desde el borde hasta el centro y cubre cada cuarto con diferentes ingredientes. Dobla, dobla, pliega y ya está hecho tu envoltorio de pizza triangular. Solo tienes que tostarlo ligeramente en la sartén por ambos lados. Es perfecta para comerla directamente o para llevarla a tu próximo pícnic. Además, ¡está muy buena con rellenos dulces!

Ve a lo elegante con estas bellezas: Pizza bagel. Corta el bagel por la mitad y unta cada mitad con salsa, luego ponle salami y espolvorea queso por encima. Para darle el toque final, rocía un poco de salsa barbacoa por encima después de hornearlo. Tuesta en el horno para obtener los mejores resultados y disfruta del bagel para el desayuno, el almuerzo o la cena. Consejo: ¡junta dos mitades para crear la hamburguesa definitiva!

Después de una larga maratón de reuniones, te pitarán los oídos y te rugirá el estómago. ¡Regálate un pequeño descanso! Con esta base de pan puedes vencer cualquier hambre. Basta con cortar el pan plano, cubrirlo con atún, pimientos, cebolla, aceitunas y ajo, y aderezarlo con aceite de ajo. Luego añade un poco de mozzarella por encima. ¡Buen provecho!

Un poco más pequeños, pero no menos deliciosos son estos sándwiches de pizza de pita. Solo tienes que coger un pan de pita, untarlo con salsa de tomate y cubrir uno de los panes con algunas aceitunas, jamón, queso y, con un poco de amor, colocar un segundo pan de pita encima. Tuesta el sándwich entero por ambos lados hasta que el queso esté bien fundido. Corta por la mitad y sirve. No necesitas nada más para un breve descanso de la vida cotidiana.

A algunos les gusta caliente... ¡A nosotros también! ¡Las cosas se pondrán muy calientes y sabrosas con esta pizza de queso con chile! Complementamos nuestra pizza de Dr. Oetker favorita con una base extra gruesa, al estilo americano, añadiendo doble queso: cheddar rallado y gouda. Porque nunca se tiene suficiente queso en la pizza - ¡ya hemos hablado de ello y lo decimos en serio! Cubre con tantos jalapeños como quieras y mételo en el horno. 

Si después de un largo día de trabajo todavía tienes energía para hacer una masa de pizza casera, te recomendamos que hagas la pizza Detroit para dos. Es crujiente, tiene una corteza gruesa y una maravillosa capa suave de queso y rodajas de salami por encima. Tradicionalmente se hornea en forma de rectángulo, ¡pero creemos que así queda redonda!

Cuando no damos para más, dejamos que el horno cocine por nosotros. Eso no significa que la cena deba ser menos refinada. ¿Por qué no probar el camembert al horno con palitos de baguette para pizza? ¿Suena complicado? No lo es en absoluto: Primero se cuece el camembert en el horno y, poco después, se introducen las baguettes de pizza. ¿Quizá solo una o dos? O tal vez tres, si vas a cenar en compañía. Una vez horneado, corta las baguettes en palitos y ponte a mojar y a disfrutar. ¡Que empiece el fin de semana!